Gabriel será testigo de la brutalidad del conflicto y finalmente, huye a la selva en donde se encuentra con un pequeño grupo de rebeldes. Una maravillosa historia con personajes que se muestran en detalles y vívidos representados por el autor de novelas gráficas, el francés Emmanuel Lepage que además de la historia principal, toca temas como el papel de la Iglesia en esa guerra y lo referente a la homosexualidad.
Es una historia llena de emociones, aunque tratándose de un artista ajeno a la realidad nicaragüense y a la historia del momento, logra en gran parte, plasmar gráficamente motivos muy parecidos a lo real, maravillándonos con verdaderas obras del arte cómic a todo color familiarizado esencialmente por la hazañas de El Ché (Ernesto Guevara).
Gabriel conoce a un hombre de ojos azules que le influyeron de manera significativa en el diseño final de la pintura. La imagen fue un éxito completo. Los residentes aman el mural, pero la alegría es de corta duración. Diego recibe el bloc de dibujo de Gabriel y ve en esos bocetos iniciales a un hombre con algunas de sus partes desnudas y reconoce más claramente que se trata de un rebelde, Diego consiente que eso ponía en peligro su propia vida, reclamó severamente a Gabriel hasta el punto de armarse una pelea entre los dos, la Guardia tuvo que intervenir. A los pocos días muchos residentes estaban detenidos, una mujer llamada Concepción muere. Diego acusa abiertamente a Gabriel. Aparece el padre de Gabriel, que le ayuda a huir a la selva donde tropieza con los guerrilleros. Él encuentra un nuevo hogar, y conoce a Fausto, su confidente más cercano. Pero la Guardia va pisándoles los talones a los guerrilleros que se dirigen a su cuartel en la selva, para el grupo es una auténtica carrera de obstáculos. Gabriel pronto se convertirá en un miembro permanente del grupo, siempre con el temor de su condición ante la iglesia católica, sus sentimientos por Fausto se hacen más fuertes.
Es un cómic que se los recomiendo, los dibujos son simplemente perfectos, el estilo de carácter pictórico cautiva desde la primera página, el estilo realista, fondos detallados y los personajes vivos llevan al lector a las selvas nicaragüenses, uno se sumerge junto con Gabriel en esa selva y vivir las aventuras del sacerdote que además de luchar contra la inclemencia de la Naturaleza, lucha como guerrillero y contra sus propios sentimientos homosexuales en otras palabras es una historia muy convincente donde en muchos casos el texto está de más.
Es una historia llena de emociones, aunque tratándose de un artista ajeno a la realidad nicaragüense y a la historia del momento, logra en gran parte, plasmar gráficamente motivos muy parecidos a lo real, maravillándonos con verdaderas obras del arte cómic a todo color familiarizado esencialmente por la hazañas de El Ché (Ernesto Guevara).
Resumen de “Muchacho”
Nicaragua, 1976: Gabriel de la Serna es un candidato para el sacerdocio y también hijo de un hombre influyente y muy conocido en Nicaragua. El joven llegó con el pintor Joaquín al remoto pueblo de San Juan del Norte para pintar allí un mural para la iglesia del pueblo. El pintor local; Rubén, dio la bienvenida con gran alegría al joven artista. Al principio no fue nada fácil para Gabriel, sobre todo porque los pobladores eran, en su mayoría, partidarios de la guerrilla y sabían exactamente quién era el padre de Gabriel, especialmente Diego, un joven de su misma edad que le hace su estadía más difícil. Por otra parte, no le era fácil hacer un mural que destacara, las personas sólo tenían conocimientos de motivos cristianos comunes, Gabriel apunta a dibujar a la gente del pueblo, registra los residentes en todas sus actividades, ya sea en el trabajo, en fiestas o festividades, en el mercado, etc. Su cuaderno de dibujo lo llenó y poco a poco llegó a conocer a las personas que trataba y a las que él dibujaba. El fresco dentro de la iglesia fue tomando forma y Gabriel para representar la pasión de Cristo, eligió a personajes rebeldes, lejos del diseño habitual.Gabriel conoce a un hombre de ojos azules que le influyeron de manera significativa en el diseño final de la pintura. La imagen fue un éxito completo. Los residentes aman el mural, pero la alegría es de corta duración. Diego recibe el bloc de dibujo de Gabriel y ve en esos bocetos iniciales a un hombre con algunas de sus partes desnudas y reconoce más claramente que se trata de un rebelde, Diego consiente que eso ponía en peligro su propia vida, reclamó severamente a Gabriel hasta el punto de armarse una pelea entre los dos, la Guardia tuvo que intervenir. A los pocos días muchos residentes estaban detenidos, una mujer llamada Concepción muere. Diego acusa abiertamente a Gabriel. Aparece el padre de Gabriel, que le ayuda a huir a la selva donde tropieza con los guerrilleros. Él encuentra un nuevo hogar, y conoce a Fausto, su confidente más cercano. Pero la Guardia va pisándoles los talones a los guerrilleros que se dirigen a su cuartel en la selva, para el grupo es una auténtica carrera de obstáculos. Gabriel pronto se convertirá en un miembro permanente del grupo, siempre con el temor de su condición ante la iglesia católica, sus sentimientos por Fausto se hacen más fuertes.
Es un cómic que se los recomiendo, los dibujos son simplemente perfectos, el estilo de carácter pictórico cautiva desde la primera página, el estilo realista, fondos detallados y los personajes vivos llevan al lector a las selvas nicaragüenses, uno se sumerge junto con Gabriel en esa selva y vivir las aventuras del sacerdote que además de luchar contra la inclemencia de la Naturaleza, lucha como guerrillero y contra sus propios sentimientos homosexuales en otras palabras es una historia muy convincente donde en muchos casos el texto está de más.
